Ya ha pasado un año desde que el Róber y la Quel llegaron a Nueva York, y uno pensaría que él ya ha encontrado su lugar. Spoiler Alert: no lo ha hecho.”. Pero una nueva vuelta del destino pondrá sus sueños al alcance de su mano, y luego no, y luego sí, y luego no, como si de una rotonda (¡o la Rotonda!) se tratara. Dando vueltas por ella, conocerá nuevos personajes –como el agotador Miguel y el inclemente profesor Collingwood–, se reencontrará con otros –como el Lambretta y los Primos del Campo– y descubrirá que hacer amistades en otro idioma no es fácil… ¡cuando tenga que traducir la palabra huevón!