La incidencia de la pandemia de coronavirus en la vida comunitaria parece ser evidente. Los seres humanos que han vivido envueltos en ella durante el año 2020 y 2021, ciertamente han visto sus trayectos vitales alterados, modificados o perturbados. El virus se ha encontrado, simbólicamente al menos, en conversaciones, discusiones, políticas públicas, familias, trabajo, educación y vida personal. Estas múltiples dimensiones de la crisis sanitaria posiblemente tendrán un impacto a largo plazo que aún no podemos entender y que nos exigirá continuo debate y reflexión. En dicha dirección apunta esta publicación del Instituto de Humanidades de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo: plasmar un punto de reflexión inicial sobre los tópicos que la pandemia nos ha hecho visualizar y que seguirán orbitando en torno a nuestras sociedades, tiempo después de su derrota definitiva.