Un día las letras se cansaron de formar las mismas palabras: ya no
significaban nada, eran mal dichas y peor leídas. Cada una se fue con su grupo
aparte y armaron puros sonidos incomprensibles. Entonces apareció la vieja y
muda H, para recordarles que sólo podrían decir algo juntas.
Un cuento para primeros lectores sobre la importancia del lenguaje y de lo
común, con guiños humorísticos y a todo lo que ignoramos de los lenguajes no
humanos. Ilustrado con dibujos, pinturas y collages por la artista Antonia
Daiber, el libro inspira juegos y manualidades para todas las edades.