¿Cuáles son las condiciones para que existiera la escena artística del SoHo en los setenta? Es la pregunta en la que se ahonda en este libro. Se sumerge en una comunidad de artistas, y en cómo el espacio creativo interdisciplinar reforzaba experimentos que iban más allá de galerías y teatros, para tomarse calles, edificios abandonados, parques, las copas de los árboles y subterráneos.
Este libro rescata voces e historias recogidas a través de lecturas atentas, revisión de archivos, pero fundamentalmente de conversaciones con Carmen Beuchat, Barbara Dilley, Richard Nonas, Rachel Wood y Carol Goodden, personas cuyas prácticas fueron determinantes y determinadas por el ecosistema creativo del SoHo de los años setenta. Aparecen así nuevas versiones de la historia; voces en su mayoría de mujeres, dejaron ver una serie de borraduras históricas que hoy en día, con distancia y mayor conciencia de las problemáticas de género, podemos identificar.