«Un mundo feliz» es posiblemente la novela más leída de Huxley, y su influencia es evidente tanto en buena parte de la novela de ciencia ficción de calidad como en las novelas filosóficas. Presenta un mundo en el que el Estado controla hasta el más mínimo detalle de la vida de los individuos, a los que mantiene en una ignorancia producto de un depurado «lavado de cerebro». «Nueva visita a un mundo feliz» es la obra que años después escribió Huxley analizando «Un mundo feliz» y juzgando en qué se había equivocado y, sobre todo, en qué había acertado al detectar tendencias sociales y políticas que amenazaban a la cultura humanística y a la libertad del ser humano.