Los personajes que ocupan estas páginas - escritas con más de un siglo de distancia - son el reflejo de una sociedad chilena pasada que, bajo ciertos códigos "morales", mantuvo un orden social. Hoy, en pleno siglo XXI, esos códigos demandan ser resignificados.
En estas dos novelas breves, Miserias ocultas y La hora de queda, la escritora Inés Echeverría Bello elaboró una denuncia a la clase aristocrática a la cual perteneció y le dio una voz a la clase social vulnerada, especialmente a un ser femenino constreñido por un orden patriarcal que la reduco a la categoría de objeto. De manera audaz, también se refirió al doble estándar de la aristocracia chilena que devino en decadencia con la llegada del siglo XX, sin que sus propios protagonistas fueses capaces de verlo y sobrellevarlo.
Este rescate literario busca no solo valorar el trabajo escritural del género femenino, sino que también repensar la sociedad en la que nos movemos; el lugar que ocupan las mujeres en ella; las desigualdades de clase y las idiosincrasias propias de una nación que, en medio de un proceso constituyente, busca su identidad.
Narrativa Ghirlanda se centra en el rescate de obras de carácter narrativo que revisten importancia para su (re)lectura en el siglo XXI. Con ellos, se busca poner en valor el trabajo de escritores y escritoras, como parte de patrimonio literario que nos pertenece a todas y todos.