En este libro se analiza la existencia del saber pedagógico como válido, legítimo y necesario. Se especifica su carácter singular, experiencial y práctico; se explicita su génesis, desarrollo y transferencia. Sus alcances sobre la formación y la capacitación de los educadores se complementan con los antecedentes académicos que lo avalan. Los maestros y educadores que viven la experiencia de este saber reconocen que en él encuentran un núcleo que le da sentido y éxito a su actuar y que su olvido afecta la equidad de la educación.