Madre que estás en los cielos es la obra que consagró a Pablo Simonetti como figura indispensable en el panorama literario chileno e internacional.
A los setenta y siete años, Julia Bartolini decide escribir sus memorias. En ellas deshilvana miedos fraguados en su infancia, para los que no tuvo solución en la edad adulta. Intenta descifrar la relación con sus padres y su marido, y en especial con dos de sus hijos, quienes desafiaron los códigos de su tiempo y sus esperanzas. Sobre todo, quiere encontrar una explicación para haber fracasado en aquello que mayor importancia tenía para ella: formar una familia feliz.