Este libro ofrece una interpretación de cómo la sociedad moderna se desarrolló en Occidente en los últimos seis o siete siglos. En lugar de definir de antemano los términos "sociedad moderna" o "modernidad", se utiliza una descripción narrativa de cuatro rutas clave hacia la modernidad. Estas rutas incluyen el surgimiento del nacionalismo, la afirmación de la individualidad, la adopción del pensamiento científico y la transformación económica hacia la industria y el comercio. Se explora cómo estas rutas influyeron en la evolución de instituciones y prácticas concretas y en la formación de ideas y mentalidades. El objetivo es responder a la pregunta fundamental de la sociología: ¿qué distingue a una sociedad moderna de otras formaciones sociales? Esto, a su vez, permite abordar la pregunta de si todavía vivimos en una sociedad moderna o hemos avanzado hacia otro tipo de sociedad.