El lugar sin alma y El trabajo: nuestra violencia legitimada dan forma a una sola obra presentada bajo el título de Homo laborans. Un libro, dos autores amparados tras un seudónimo. Dos reflexiones en extremo íntimas y profundamente sinceras sobre el trabajo en nuestro tiempo y el lugar que ocupa en la sociedad actual. Dos relatos que se mueven entre los géneros del diario personal y el literario. De ahí entonces el que no tengan un orden de lectura, que se presenten de esta forma en el libro físico.