Hoguera es la historia de un hombre anónimo que decide construir con sus propias manos una casa en medio de una naturaleza devastada. Mientras lo hace, pese a las incontables dificultades que tendrá que sortear, irá conociendo un mundo no humano que reformará su vida: su pensamiento, su visión de sí mismo y del mundo, sus sueños, serán trastornados a una nueva dimensión. Animales salvajes, incursiones bajo la Luna, apariciones fantásticas, quimeras y epifanías, encuentros de tesoros, euforia y desazón crepitan en los relatos de este fuego. Una hoguera que se enciende y persiste en medio de la noche.
Si la casa se construye al fin, no lo sabemos del todo. Lo que era un proyecto acotado a la edificación de un refugio material, un espacio físico, termina siendo la construcción de un universo entero. Las mismas estrellas modificarán sus constelaciones en el transcurso de esta aventura inesperada. Hoguera contiene once relatos cortos que transitan un vaivén entre el cuento, el ensayo y la poesía, cada uno de ellos acompañado de una ilustración que evoca los emblemas barrocos y las miniaturas medievales, épocas en que el misterio del mundo y el cielo eran aún velados y sostenidos por la literatura. Tantas palabras, moldeadas durante tantas generaciones para nombrar y separar las infinitas cosas de la existencia para que podamos comprender el mundo, para que nos sea útil, pero que, al hacerlo, alzan ellas un muro entre la naturaleza y la visión antropocéntrica de la humanidad, que se pone a sí misma como centro del cosmos, midiendo todo con la vara de su propia medida, como un sol que con su luz de verdad clausura los erotismos y los ciclos.
Pero, al fin, todo es vano, todo fuego se extinguirá algún día y, de todos ellos, de todos los sucesos que ardieron en su tiempo y que ya no están, siempre podremos reunir sus cenizas y rastrear en ellos, en esos residuos oraculares, con arte y escritura, una literatura para el porvenir. Esto es Hoguera: las cenizas literarias del fuego, las noches y los sueños de un hombre que abrió los ojos a la noche mientras construía un hogar para cuidarse, irónicamente, de ella. Antigua diosa de la que terminará siendo su más ferviente devoto.