La nueva novela del ganador del Premio Alfaguara: una ficción arrolladora sobre la medicina, la oposición entre ciencia y religión y los límites entre lo humano y lo inhumano.
Inglaterra, 1781. El joven William debe recorrer las tierras de su familia y aprender su manejo. En lo profundo de las aldeas, se percata de la presencia de seres extraños que nunca creyó que pudieran existir. Seres deformes, incapaces de comunicarse (o eso parece), viviendo como animales. ¿Son seres humanos? Nunca le habían hablado sobre estos engendros y nadie, al parecer, quiere hacerlo ahora salvo su tutor, que decide presentarle a médicos, botánicos, naturalistas, geógrafos… dispuestos a indagar, a través del pensamiento científico (aunque sin dejar de lado la teología), sobre cualquier tema. De todo ello nace su vocación por la medicina y el inicio de su camino de aprendizaje sobre la vida, aunque también provoca el alejamiento definitivo de su familia.