En el transcurso de esta novela breve, Adelio Matamala nos lleva delicadamente a los momentos sensibles de la vida de Dimitri Mendeléiev, gran químico ruso creador de la Tabla Periódica. Una vida que no fue fácil y que la muerte visito tempranamente. Con fino talento, el autor ilustra y reflexiona sobre la vida y el vacío que pueden extinguir la energía vital de un ser humano, pero que también pueden alumbrar sus dolores mas recónditos y llevarlo a las grandes obras.
Exquisita y depurada, trazando un circulo perfecto de principio a fin, esta es una obra necesaria para comprender mejor el laborioso camino de los descubrimientos científicos y el rol que puede jugar la adversidad en forjar un espíritu genial.