En este ensayo, la autora pone en cuestión el concepto de pregunta tal como ha sido desarrollado en la tradición gramatical española y propone nuevas (sub)categorías de análisis, a la luz del examen de 35 muestras de habla obtenidas en el marco del proyecto del habla culta de Santiago de Chile. Se trata, entonces, de estudio basado en una perspectiva eminentemente funcionalista del lenguaje, en el sentido de que busca apreciar e interpretar los fenómenos lingüísticos en su contexto pragmático-discursivo real.