"Tres relatos como cuadros familiares que cuelgan de las paredes de una casa en San Bernardo. Dos hijos criados por una madre incondicional. Un chofer entregado a violentas jornadas en el transporte público capitalino. Y el narrador de Cachivaches, el menor de la familia, el que sufre las caídas del hermano, estudia hasta el hartazgo y enfrenta a sus padres desde lo más visceral e íntimo de sus recuerdos: la competencia por entrar al Instituto Nacional, la culposa rutina de un padre sobrepasado por su trabajo, la enfermedad de la madre que amenaza con llevarse todo, menos el amor.
Este primer libro de Diego Riveros se asoma a los rincones más sensibles de una familia desarmada, trajina en la memoria intentando reconstruir un reflejo luminoso entre los pedazos, encandilando con momentos de ternura y desconsuelo.
Cachivaches es la vida estancada en una piscina plegable en el patio de la infancia, rayones en las paredes que intentan convencernos de que, pese a todo, hemos crecido."