"Bajo la bandera del ocio indaga en la memoria de una adolescencia callejera, barrial, situada en los dos mil, antes de la masificación de internet: «Esto comienza cuando tenías unos tres o cuatro o cinco años y eras un niño pálido con las uñas color sol», leemos al inicio de este poema largo, protagonizado por un grupo que rapea entre colillas, piedras y gimnasios en construcción.