Stink decide escribirle una carta al fabricante del rompemandíbulas supergaláctico para quejarse... ¡y la respuesta que recibe es fantástica! De pronto, le envían (gratis) una enorme caja llena de muchísimos caramelos y dulces de todo tipo. Stink está tan contento que decide escribir más y más cartas. Sin embargo, esto le traerá algunos problemas.