Autos, taxis y autobuses en un vaivén furioso, motos en zigzag, gente que anda como cucarachas atontadas. La vida rueda acelerada en las veredas, calles y avenidas. Pero una niña y su bicicleta van a proponer una pausa al ritmo frenético de la gran ciudad. El autor nos trae una historia acumulativa, muy divertida, sobre la inocencia infantil. Una niña para, sin advertencia previa, su bicicleta en medio de la calle, obstaculizando el tránsito e irritando a los adultos que están siempre apresurados.